Concierto homenaje de Paco de Lucía en el décimo aniversario de su fallecimiento. Con el recuerdo puesto en los diez años, nada menos, que se cumplen muy pronto de la desaparición del maestro Paco de Lucía, la velada se presenta como una oportunidad que con el tiempo se contemplará como hito, al juntar a dos de nuestros principales valores de la guitarra y el piano. Además, interpretando piezas de especial envergadura y significado no sólo dentro de nuestro repertorio musical, también para el propio Palau de la Música y en lo que significó la monumental obra del genio de Algeciras.

En el incomparable marco del Palau de la Música Catalana, presentamos a dos magníficos intérpretes y compositores que ya marcan el paso en sus respectivas disciplinas musicales:  Alejandro Hurtado y Andrés Barrios, guitarrista y pianista, respectivamente. Ambos de formación clásica, ambos flamencos, ambos eclécticos, ambos líderes de su generación.

En Alejandro Hurtado convergen todas las condiciones para asegurarnos de estar ante el no va más de la guitarra. De formación académica tanto en lo clásico como lo flamenco, su solvencia le ha valido para alzarse como ganador en numerosos certámenes de guitarra al tiempo que es un cotizado acompañante de las principales figuras del cante flamenco.

Entre los años 2022 y 2023 culminó su debut discográfico por partida doble. Con un disco de flamenco clásico y otro de composiciones propias. Aunque es muy posible una próxima publicación, esta vez en el terreno clásico. Lo dicho, un no va más.

El sevillano Andrés Barrios es el futuro de nuestro piano, al aunar una intensa y premiada formación clásica con la técnica, conocimiento y vivencias flamencas y jazzeras. Al igual que su compañero de cartel, ha sido merecedor de numerosos galardones, destacando el “filón” del festival del Cante de las Minas. A sus sobresalientes condiciones interpretativas, se unen unas generosas dotes creadoras y la autoría de varios discos en solitario en los que interpreta sus composiciones que ha paseado por todo el mundo. Por cierto, y manténganse atentos a su original conexión con el público.

Disfruten de una velada que será santo y seña para aquellos que busquen pistas sobre el presente y futuro de nuestra música, al tiempo que recordará como se merece a uno de los más grandes genios que nuestro arte alumbró.